Vamos a ver cómo funciona el alquiler o préstamo de acciones, sus principales ventajas, su finalidad principal y cómo se realiza.
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Cómo funciona el alquiler o préstamo de acciones
El alquiler o préstamo de acciones es un contrato en virtud del cual una parte (prestamista) transfiere temporalmente acciones a otra parte (prestatario). El tomador está obligado a devolver esos valores en el momento en el que se le soliciten o al vencimiento acordado para ese préstamo.
Dos cuestiones destacan en este tipo de contrato:
- El prestatario que recibe las acciones no las puede tener eternamente, de hecho en el contrato ha de constar la duración del alquiler.
- También en el contrato ha de estar reflejada la compensación económica, es decir, el dinero que el prestamista recibirá al final del periodo.
Por tanto, el alquiler o préstamo de acciones consiste en la adquisición o venta de acciones sin necesidad de disponer del importe total para su compra o de los títulos para su venta. Además, permite generar un ingreso extra y la posible revalorización de los activos en los que se está invirtiendo, por prestar acciones a un tercero.
Aquellos inversores que se centran a largo plazo prestan sus acciones para recibir una cantidad económica. Por otro lado, los inversores centrados en el corto plazo alquilan acciones a terceros.
El mecanismo o funcionamiento del préstamo o alquiler de acciones se sencillo: el prestamista presta acciones a otro inversor, el prestatario durante un periodo determinado y por un importe acordada entre las partes y que recibirá al final del periodo determinado.
Hoy en día es muy fácil hacerlo mediante brokers. Por ejemplo, los brokers toman prestadas tus acciones y las alquilan a otros inversores. Cobrará intereses por ello a los prestatarios y divide todos los intereses contigo de forma equitativa y te da el 50% de los intereses reciba por haber alquilado tus acciones. Y por si fuera poco, el broker será tu contraparte y está obligado a devolver las acciones, aparte que seguirás recibiendo dividendos (puesto que tú sigues siendo el propietario de las acciones aunque las hayas prestado).
Qué acciones se pueden prestar o alquilar
En principio puedes prestar o alquilar todas aquellas que tengas en tu cartera.
Lo que sucede es que esto va con la demanda, es decir, será mucho más sencillo encontrar inversores que quieran alquilar tus acciones si estas son de las que tienen mayor demanda e interés por la comunidad inversora.
Importante saber que el alquiler de acciones no afecta a tus posiciones y puedes cerrarlas cuando quieras.
Ventajas del alquiler o préstamo de acciones
- La ventaja es que permite al propietario un ingreso extra, además de la posible revalorización de los activos, al prestarlos a terceros.
- Si el prestatario no te devuelve las acciones no pasa nada, ya que está la fianza o garantía (en efectivo) que se conserva como dinero del cliente.
- Para el prestatario la ventaja radica en que buscan aprovechar las caídas del mercado y con esas acciones lo que hacen es venderlas para recomprarlas después más baratas. En nuestro país no se permite vender acciones sin tenerlas, de manera que los inversores bajistas necesitan recurrir al préstamo de acciones. Era una práctica reservada no hace mucho a los inversores institucionales, pero hoy en día ya está también al alcance de todos.
Pues ya sabes cómo funciona el alquiler o préstamos de acciones, una práctica que ya está al alcance de todos los inversores minoristas y que ofrece interesantes ventajas, tanto para el prestamista como para el prestatario.