Enero ya no marca el rumbo de los mercados

Enero ya no marca el rumbo de los mercados. El viejo adagio en Wall Street hace tiempo que dejó de cumplirse, Lo explico a continuación.

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Enero ya no marca el rumbo de los mercados

Seguro que ha escuchado una frase muy conocida en Wall Street que dice que según se comporta la Bolsa en el mes de enero, así lo hará el resto del año. Es decir, que si el mes de enero es alcista, el año será alcista, y viceversa, si enero es bajista pues el año también lo será.

Históricamente hablando, es cierto que cuando enero es un buen mes para la renta variable, los siguientes 11 meses suben el 86% de las ocasiones, pero también lo es que cuando enero termina en rojo el resto del año sube el 62% de las ocasiones.

Y no sólo eso, es que en los últimos años no se cumple precisamente, de hecho en las últimas 10 ocasiones en las que el mes de enero fue bajista, el resto del año el S&P500 subió y en ocasiones con bastante fuerza como fue el caso en el 2021.

Por tanto, no habría que preocuparse mucho por si un mes de enero cierra en rojo, como ha sido este año 2022.

Pero veamos los números que son muy interesantes, concretamente los años en los que el mes de enero cerró con pérdidas y cómo terminó el ejercicio 11 meses después (primera cifra es el año, segunda la caída de enero y tercera el rendimiento de todo el año):

  • 2000: -5%, -5%
  • 2002: -2%, -22%
  • 2003: -3%, +30%
  • 2005: -3%, +6%
  • 2008: -6%, -34%
  • 2009: -9%, +35%
  • 2010: -4%, +17%
  • 2014: -4%, +16%
  • 2015: -3%, +2%
  • 2016: -5%, +15%
  • 2020: -0.2%, +16%
  • 2021: -1%, +28%

Y cogiendo todas las ocasiones en la historia con enero en rojo, tenemos que la caída media en ese mes es de un -4% y el resto del año una subida de +13,1% subiendo el 90% de las ocasiones.

Pero vamos a hacerlo más parecido a lo sucedido en enero de 2022, es decir, cojamos en la historia sólo los meses de enero que hayan tenido una caída superior al -5% como ha pasado este año. Tenemos entonces que ha sucedido en 10 ocasiones (años 1960, 1970, 1977, 1978, 1990, 2000, 2008, 2009 y 2016) y si contamos el 2022 pues 11 veces (cayó un -5,3%). La caída media en enero de esos años es de un -6,3% (las mayores son de -7,1%, -7,6% y la más pequeña es de -5,1%). En el mes siguiente, en febrero, el rendimiento medio es de un -1,6% y termina el año con un rendimiento medio de +2,7%.

Por tanto, 2 conclusiones a tener en cuenta:

1) Cuando enero ha sufrido una caída superior al -5%, la Bolsa cae al mes siguiente de media un -1,6% y cierra el año de media subiendo un +2,7% (cierra en verde el 68% de las ocasiones).

2) Cuando enero es negativo, independientemente de lo que haya caído (da igual si mucho o poco), el año lo cierra subiendo de media un +13,11% y en verde el 90% de las ocasiones.

Queda claro entonces, de manera objetiva, que enero ya no marca el rumbo de los mercados y que el famoso efecto enero ha pasado a ser algo anecdótico.

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